Lo mismo da 40 que 20

Recién cumplidos los cuarenta me viene a la mente, cual puñetazo en el estómago, una frase que he oído por ahí... "lo mismo da 40 que 20" ¡y una leche!
A mí con 20 no me preocupaba dejar las cosas a medias, porque tenía todo el tiempo del mundo para acabarlas; con 40 parece que el mundo se va a acabar mañana y me gustaría terminar hoy todo lo que no acabé ayer, ni antes de ayer, ni la semana pasada, ni hace 20 años...
En aquel entonces me interesaba lo que pasaba por el mundo, porque creía que éste se podía cambiar, estaba atenta a las noticias, la política,...; ahora me importa un pimiento la política, ya que cada vez son mayores los abusos de quienes nos dirigen, y la bola se hace más grande. No presto atención a las noticias, y con respecto al mundo, no sólo lo vamos a cambiar... lo destruiremos.
Con 20 también me lo iba a comer... el mundo. Creía que sabía muchas cosas y que aún aprendería infinidad de ellas; con 40 siento que todo lo que aprendí se me olvidó, académicamente hablando.
Si hablamos de experiencia, ¡oh sí! con 40 tengo más, pero... ¿de qué me sirve? disfruto menos de las cosas, al menos en este momento que algún achaque que otro me molesta a diario, y no todos los días es el mismo; con 20 yo no tenía achaques. En aquella época, por ejemplo, salías de marcha 3 días y necesitaba 1 para recuperarme, ahora, si salgo 1 día de marcha necesito 3 para recuperarme (si lo pienso detenidamente, es cierto, los números son los mismos).
Podría seguir comparando durante horas, pero no tengo tiempo...